martes, 21 de febrero de 2012

Prosa poética. Miguel Bautista. Escritor


SEMBLANZA DE LA MUJER QUE SE PARECÍA A UNA ESCULTURA

Su cuerpo era bello, elemental como una escultura de Oceanía cuyas piernas eran como campos de trigo a explorar, a fecundar logrando el éxtasis, la felicidad deseada. ¡En sus cabellos había respiración de selva, en su cara música en la noche y en sus brazos hogaza de pan tierno! ¡Era mujer fatal por sus misteriosas apariciones en el umbral de la pradera alumbrada por el sol. Después desaparecería en obstinadas ausencias que hacían pensar en una diosa desairando al mundo!  Decían en el poblado que era la última diosa maya cumpliendo las profecías del fin del mundo ¡Pertenecía al mundo dando éxtasis a su dueño, amores implacables y orgasmos continuos, era la diosa del cuerpo como campo de trigo!


Miguel Bautista
Escritor
Ciudad de México, febrero 2012